Nuestro lugar de trabajo es un antiguo teatro, de arquitectura neoclásica que fue construido en 1889 como sede de la Sociedad de Socorros Mutuos Unione e Fratelanza, sociedad que formaron los italianos que llegaban para trabajar en la recientemente fundada ciudad de La Plata.
En esta sala se vio desfilar a personalidades y glorias de la música, la lírica y el teatro de la época como también a distintas personalidades políticas como el Príncipe Humberto de Saboya. Eran habituales las matinés, coronadas con un gran baile al final, en el que solía tocar alguna orquesta de la época.
La sala consta de un gran recinto de 12 por 32 metros rodeado de diversas in instalaciones, que tuvieron distintas funciones en su época (consultorios, oficinas, buffet) y al fondo un patio, cuartos de vivienda de caseros y cocina.
En los años treinta se comenzó a explotar la sala como cinematógrafo, como eran épocas del cine mudo existía un piano que era ejecutado durante la exhibición de los filmes.
Con la llegada del cine sonoro la concurrencia del público fue masiva y llegaron a darse funciones diarias de tres películas en continuado.
Posteriormente fue vendida a particulares que cambiaron el destino del lugar e hicieron modificaciones, como el quite del piso de pinotea y las butacas, convirtiendo la sala en taller, astillero y depósito.
La sala se encontraba abandonada desde la década del cincuenta y en peligro de ser demolida, dada la inutilidad de sus instalaciones para otros fines que no fueran los artísticos. Así fue que nuestro grupo de teatro, buscando un lugar de trabajo finalmente encontró éste que por ser un edificio histórico, además nos dio la responsabilidad de su conservación como patrimonio de una época evitando así su desaparición, como ocurrió con la mayoría de los edificios de estilo italianista, que se construyeron en esta ciudad.
El esfuerzo que venimos realizando para que este lugar permanezca abierto es enorme y las necesidades son incontables. El edificio requeriría de un tratamiento acorde con la restauración de un edificio histórico, cosa difícil de lograr en un país donde prima la cultura de de la picota y donde aún falta instaurase el pensamiento de que los hechos culturales son para beneficio de toda la comunidad y por ello requieren del aporte de ésta para poder sustentarse. |
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