Siembra el cielo entre nosotras

Siembra el cielo entre nosotras,
una tragedia postapocalíptica pampeana,
escrita y dirigida por Jimena Repetto

Año 2516. Elvira y Janu reviven su pasado en un onírico presente de campo muerto. Tilio, el fantasma de sus amores cruzados, las recuerda. Los animales amenazan. Cuando termine la noche llegará el último tren de evacuados, antes de que el Estado decida inundar las tierras. Quienes no se suban nadarán entre los peces.

La puesta de esta tragedia futurista pampeana, escrita en verso y con reminiscencias de la gauchesca, busca generar -a partir de la banda sonora en vivo, proyecciones y sombras en movimiento- una experiencia poética, donde lo sensorial cobre relevancia.
Sus tres personajes -Elvira, Janu y Tilio- representan en sus búsquedas y conflictos la interrogación que mueve a la obra: ¿qué será del campo cuando ya nada pueda ser sembrado? ¿A qué tierra irán los hombres a nacer sus hijos, a criar sus cabras, a llorar sus tumbas? Siembra el cielo entre nosotras dispara así un imaginario postapocalíptico en el que se dibuja el efecto de la destrucción del hábitat y evidencia cómo -pese a las contradicciones humanas- los sentimientos más nobles son los que permiten pervivir, sobrevivir y morir en amor, incluso, cuando nada más queda.
"Dadas las condiciones actuales de la siembra, en el futuro la tierra estará tan destruida que se hará desierto. Tomando esta idea, pensé en cómo crear un espacio que refleje el despojo que imagino en un futuro distópico. Y en él, la pervivencia de los sentimientos, del amor de la hermandad, como aquello que salva y sobrevive. Partí de esta idea que es tan cercana a nuestra literatura gauchesca y pensé en ese género, en su estructura en verso, en sus universos. Así, la fuerza de la palabra se me apareció como lo que queda cuando todo se ha destruido. La obra está escrita en un español pasado por el embate del tiempo, en una lengua que vuelve a sus usos antiguos, ya que en su 'presente futuro' se parece mucho a un pasado lejano. A partir de ahí, trabajamos en la puesta con elementos analógicos: un cielo de diapositivas, una banda sonora hecha con instrumentos caseros, escenografía y vestuario compuestos con elementos nobles -madera, algodones, pajonales- y materiales reciclados.", cuenta Jimena Repetto sobre su propuesta.